Es una buena idea enseñar a tus hijos las habilidades del manejo de dinero. En nuestra sociedad moderna una adecuada capacidad de gestión de dinero es vital. La forma en que los niños aprendan a gestionar su dinero según crecen influirá directamente en lo bien que vivan en el futuro.

Actualmente, muchos adultos hacen frente a problemas de deuda con enormes saldos en tarjetas de crédito y similares, pues no se les enseñó a manejar las finanzas personales adecuadamente.

Muchas escuelas tienen un plan de estudios de educación financiera a fin de conseguir que los niños aprendan las habilidades básicas con el dinero, pero ello no siempre es un acierto. La educación financiera es demasiado importante como para dejarla solo en manos de la escuela. Como padre o madre debes tomar en cuenta algunos pasos para enseñar a tus hijos una forma adecuada de manejar el dinero.

Paso 1. Discute asuntos de dinero abiertamente con tus hijos.

Hablar de dinero de manera natural en casa es una manera efectiva de enseñar a los niños acerca del dinero. Los niños pequeños a menudo saben más sobre el dinero de lo que suponemos. Ellos aprenden desde temprana edad que hace falta dinero para comprar las hamburguesas de McDonald’s o los juegos de video de Toys-R-Us.

Pero por otro lado, no comprenden totalmente la forma en que el sistema financiero funciona. Si no hablas de los problemas de dinero con tus hijos, pierdes la oportunidad de impartirles algunas lecciones apropiadas sobre cómo ganar dinero, ahorrar, gastar e invertir.

Paso 2. Incluye a tus hijos en las finanzas familiares.

Hablar de dinero por sí solo no puede convencer a tus hijos de tus teorías y conceptos. Ellos necesitan ejemplos de la vida real para entender mejor algunas habilidades de manejo de dinero. Una vez que los niños se sientan cómodos hablando de asuntos de dinero contigo, podrán participar en las actividades diarias de gestión de las finanzas familiares. Esto implica proporcionarles la oportunidad de observar la forma de gestionar y controlar el dinero.

Algunos ejemplos son: Ir juntos al banco a ingresar dinero en las cuentas de ahorro, dejarles que ayuden a emitir cheques y que comprueben así como se asigna el dinero para cubrir los gastos del hogar, pedirles que participen en la planificación financiera y el presupuesto del hogar.

Paso 3. Deja que tus hijos gestionen sus propios presupuestos.

Tus hijos pueden aprender mucho de escucharte hablar y, más aún, de verte hacer el trabajo, pero no hay nada como la experiencia propia de la vida real. Cuando pienses que están listos, deja que los niños manejen sus propios presupuestos. Van a aprender mucho más rápido de sus errores y aciertos.

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