Una verdad es que el tiempo pasa inevitablemente; y con el tiempo los años. Además de disfrutar y vivir a pleno el presente, también se necesita ver un poco más allá. La experiencia de mi vecina Marta fue triste. Ella, estando muy joven, emigró a los Estados Unidos. Con mucho esfuerzo compró casa, carro, viajes. En fin, disfrutó su vida. Sin embargo, cuando le tocó jubilarse no contaba con los ahorros suficientes para vivir cómodamente. Mi vecina enfermó y para pagar los gastos generados por su afección, la familia se vio obligada a vender sus propiedades. Lamentablemente, todos sus ahorros se esfumaron en un par de meses. Yo me pregunto: “¿Cómo hacer para no dejar esa “carga” a mis hijos? ¿Cómo puedo prepararme para vivir bien los años que me quedan de vida?”
Hábitos saludables
Algunas costumbres como comer balanceado y ejercitarse regularmente auguran una vejez activa y un cuerpo sano. Las citas a especialistas tienden a aumentarse con los años y con ellas, los consumos por servicios médicos. Por esta razón, practicar estas rutinas disminuirá, seguramente, los egresos de tu bolsillo. Y este consejo es válido no solo para jubilarte. El estilo de vida que llevemos puede evitarnos enfermedades. Y como decían los abuelos, sabios por experiencia, la salud es lo primero. Así que si estás pensando en jubilarte, considera que cuidar tu salud, además de todos los beneficios lógicos que conlleva, también te ayudará a disminuir tus gastos financieros.
Prioridad al ahorro
Previo a la fecha de jubilación es recomendable incrementar el porcentaje de ahorro. Puedes crear una cuenta exclusiva para depositar el dinero que destinarás a la vejez. Si bien el Seguro Social aportará un ingreso, éste no suele resultar suficiente para vivir bien. Evalúa tus gastos: ¿puedes reducir o eliminar algunos?, ¿estás comprando artículos que no necesitas?, ¿tienes artefactos que estén en buen estado y que no uses? Es la oportunidad de orientar tus esfuerzos a aumentar tu capital.
Los huevos en distintas cestas
Tu dinero puedes colocarlo en instrumentos financieros que te generen mayores ingresos. Sin embargo, ten en cuenta este detalle: diversificar la cartera. En términos financieros, consiste en minimizar el riesgo, distribuyendo tu capital en negocios diferentes. Así, ante una eventual caída de ganancias, solo una parte de tu inversión se verá afectada. Colocar todos los huevos en la misma cesta no es seguro. Al caerse la cesta te puedes quedar sin nada.
Asesoría de expertos
Para que no sufras lo de mi vecina, consulta a especialistas que te ayuden a estar preparado para esta nueva etapa de la vida. Visita la página espanol.consolidatedcredit.org donde conseguirás información muy valiosa sobre toda clase de temas financieros. No dudes en contactarlos si tienes alguna inquietud.
Recuerda que la planificación es la mejor estrategia a utilizar para iniciar cualquier proyecto de vida. Si ya estás pensando en tu fecha de jubilación, eso significa que es tiempo de buscar orientación para trazar el camino a seguir y poder dormir tranquilo.